A dos años de tu partida...

...aún es difícil la vida sin ti.

Feliz Navidad...

y Próspero Año Nuevo.














Y ya me voy, porque si no voy a su fiesta de cumpleaños, llora el niño Dios.
Vuelvo el próximo año, a menos que haya algo bien importantísimo que compartir con ustedes. Los quiero y a otros no.

Miren lo que me llegó ayer por correo...

Y se preguntarán: ¿qué tiene de especial? Pues que llegó desde París, fue hecho con las negras manos de un escultor que engaña a su mujer y que y que... y que me encanta cuando me mandan regalos. ¡Y éste viene de tan lejos!

Ya en serio, sentí bien bonito.

Hoy fue mi fiesta "oficinista" de fin de año...

Y descubrí... no, más bien confirmé que a los hombre borrachos:

• Les da por abrazar y besar, sin discriminar sexo.
• Les da por arrimarte el camarón, seas propia o extraña.
• Les da por bailar (y eso ya es muuuucho en ciertos hombres).
• Les da por armar bronca.
• Se les da el putismo del tipo "estaba muy pedo".
• A los hombres gays les da por celar al novio o al exnovio.
• A los hombres heteros les da por pintarle el cuerno a la novia.
• Les da por jurar amor eterno.
• Les da por jurar amistad duradera.
• Les da por asegurar un cariño perenne e impalpable (weeeey, sho te quiero mushoooo, es un clásico).
  

A las mujeres borrachas:

• Les da por dar las nalgas.
• Les da por vomitar.

Así de simple...




¿Y decían que nosotras las mujeres somos complicadas? ¡JA!





Y bueno, en mi caso me da por drunkdialear... pero JURO que esta noche no lo hice, pero haga favor de remitirse a las otras dos opciones.









Naaaa, mentira. Yo nunca vomito. Y para darlas, debo estar MUY peeeeeda. Y nomás estoy tantito, pero me zumban los oídos y ME CHOCA. No puedo dormir.

En la fiesta no faltó el oficinista de traje y corbata, ¿qué pedo? Es una compañía llena de darkies y emos ¿y aún hay un oficinista de traje y corbata? ESO es bizarro. ¿Yo? Pos con escote corporativo, OF COURSE.

bueno, bye.

Lo que hace la gente por que comas en su restaurante.

Yo, por supuesto, rechacé laofertalapromoción. ¿Qué voy a hacer yo con un pinchi escuincle?

¿Qué pedo conmigo? Ahora resulta que mi vida es mi trabajo y por eso no cuento nada, ¿o sea quéeeee pedo?

Pues les cuento que... ehm... este...

Ok, la hora de las confesiones, digo de mínimo hacer esto interesante (nótese la omisión del "más" porque acepto que mi blo' ha estado de mucha hueva).

Ok... el morenazo volvió de Dubai y confesó la existencia de una Sra. Armance. Pero como toooodos los casados, pretexta sentirse incompleto e infeliz (sin embargo, ningún casado que se ha atravesado en mi camino ha dejado a su esposa, por muy "mi vida es triste, me llevo mal con ella, no me complementa, etc"). Ja, ese cuento ya me lo sé y no me lo trago. Peroooooooo, voy a hacer como que me vale madres y me aventaré un mes en Alaska en brazos de un negrazo de chocolate, nada más para quitarme la tentación.

Pero por otro lado, me gusta alguien. Me gusta, pero para variar hay muchos obstáculos. Mis planes de aquí a febrero, para empezar. Luego, una historia de amargura y decepción amorosa. Súmenle que vive relejotes y que además, ni sabe que me gusta. Gunter all over again? Tal vez. Otro al que ni me atrevo a decirle las cosas, porque no sé qué pueda pasar de aquí a tres meses.

Odio mi trabajo y quiero otro. Pero no pienso dejarlo ahorita.

And last but not least: Knut... ¿se acuerdan que lo amábamos en este blog? Pues sí. Estaba bien rebonito. Pero ya no.



Ya se puso adulto y fuchi.

Floorwalker...

multitasking...

TACR!FT...

metrics...

Resourceful...



Me caga no tener mucho de qué hablar que de trabajo. PEOR cuando mi trabajo es lo más aburrido del mundo.

Vuelvo cuando tenga cosas buenas qué contar. Mientras ustedes platíquenme de sus vidas.