Ps el asunto eeeeeeeeeeesssss... que es martes, día festivo y por segunda vez no pude gozar del buffet del Damoro. La primera vez, sí fuimos mi mamá y yo (14 de febrero), pero no hubo por ser día festivo, háaaaaganme el favor. Hoy, tampoco pude ir, o sea que ahora ni siquiera nos enfilamos para allá, porque ahora también era día festivo. Terminamos en Coyoacán.
Yo, yoooooooooooo personalmente, ocupo los días festivos para exactamente lo mismo que cualquier día (no discrimino), sin embargo me caga que la gente los ocupe para que sean un domingo cualquiera, salir con la familia a caminar (gastar las suelas a lo pendejo) a Coyoacán, JUSTO el día que se nos ocurre "bueno... ps comamos tostadas". ¿Por qué no se quedan en su casa a lavar el carro y así no tener que lavarlo el sábado? ¿Por qué no aprovechan para ver esas películas que desde hace tanto querían ver? O ir al cine, ese sí abre hasta los días festivos.
Lo bueno es que durante años, no hemos tenido que esperar a que haya lugar en las fabulosas Tostadas Coyoacán, tenemos la buena suerte de llegar cuando alguien se va. Pero sí nos tuvimos que soplar a tooooooooooooda la gente pendejeando por nuestro camino. Encima mi mamá quería "hacer hambre" yendo a ver qué había en el Museo de las Culturas Populares. Cerrado. ¡Oscorts, es día festivo! Pero tuvimos que tomar ese camino hacia el mercado, el camino "popular". Niños con mocos y babas por toda la cara, señoras pasifloras viendo las "artesanías", señores panzones esperando a sus esposas, toooooooodos obstruyendo el libre paso por la banqueta.
Después de comer, nos dirigimos a Plaza Universidad para comprarme un pantalón de mezclilla (bujú, pobre de mí sólo tengo uno y por alguna razón necesito dos... pero buenoooo). Llegamos a la tienda en cuestión, me medí el pantalón, me quedó (no se me ve tan jodido el culo en esos pantalones) y dije "me lo llevo". Pero claro, no lo iba a pagar yo... entonces mi mamá busca su tarjetita mágica y... no aparecía. "Se quedó en la otra bolsa" y yo me quedé sin pantalones... literalmente.
Y luegoooooooooooooooooooo, dije "no hay bronca, me desquito con unas chelas en el institucional" al cual por cierto falté la semana pasada con todo el dolor de mi chelero corazón. Y ¿qué pasa? Hoy no hubo institucional. No hay chelas, no hay desmadrito y esas cosas lindas. Sólo pude ver CSI completo y... es todo.
Algo me dice que los días festivos no son, definitivamente, mis días.
Yo, yoooooooooooo personalmente, ocupo los días festivos para exactamente lo mismo que cualquier día (no discrimino), sin embargo me caga que la gente los ocupe para que sean un domingo cualquiera, salir con la familia a caminar (gastar las suelas a lo pendejo) a Coyoacán, JUSTO el día que se nos ocurre "bueno... ps comamos tostadas". ¿Por qué no se quedan en su casa a lavar el carro y así no tener que lavarlo el sábado? ¿Por qué no aprovechan para ver esas películas que desde hace tanto querían ver? O ir al cine, ese sí abre hasta los días festivos.
Lo bueno es que durante años, no hemos tenido que esperar a que haya lugar en las fabulosas Tostadas Coyoacán, tenemos la buena suerte de llegar cuando alguien se va. Pero sí nos tuvimos que soplar a tooooooooooooda la gente pendejeando por nuestro camino. Encima mi mamá quería "hacer hambre" yendo a ver qué había en el Museo de las Culturas Populares. Cerrado. ¡Oscorts, es día festivo! Pero tuvimos que tomar ese camino hacia el mercado, el camino "popular". Niños con mocos y babas por toda la cara, señoras pasifloras viendo las "artesanías", señores panzones esperando a sus esposas, toooooooodos obstruyendo el libre paso por la banqueta.
Después de comer, nos dirigimos a Plaza Universidad para comprarme un pantalón de mezclilla (bujú, pobre de mí sólo tengo uno y por alguna razón necesito dos... pero buenoooo). Llegamos a la tienda en cuestión, me medí el pantalón, me quedó (no se me ve tan jodido el culo en esos pantalones) y dije "me lo llevo". Pero claro, no lo iba a pagar yo... entonces mi mamá busca su tarjetita mágica y... no aparecía. "Se quedó en la otra bolsa" y yo me quedé sin pantalones... literalmente.
Y luegoooooooooooooooooooo, dije "no hay bronca, me desquito con unas chelas en el institucional" al cual por cierto falté la semana pasada con todo el dolor de mi chelero corazón. Y ¿qué pasa? Hoy no hubo institucional. No hay chelas, no hay desmadrito y esas cosas lindas. Sólo pude ver CSI completo y... es todo.
Algo me dice que los días festivos no son, definitivamente, mis días.
2 comments:
Ya ves Psycho, por no reenviar esa cadena a 20 personas en los próximos 10 minutos de cuando te llegó, tu blog se cerró, Diablos......
Si, los días festivos son gachos, incluso el cine cuesta más...
Que tengas buenos días y bonitas noches.
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