Monday, December 31, 2007

Au revoir, Lana.

Lana, después de tan sólo dos semanas de haber vivido como miembro de mi familia, tuvo que irse por varias razones. No sólo destruyó lo que encontró en la azotea, lo cual es completamente justificable. También cometió el gran delito de atacar a Momo, la reina de la casa.

Pero principalmente se fue, porque me daba tristeza pensar en su vida. Todo el día encerrada en una pequeña azotea, sin atención, sin nadie con quién jugar. Salir sólo 20 a 30 minutos por la mañana y por la noche a corretear y sacar toda la energía de un perro de su raza.

Lana ahora será más feliz, no la llevé con cualquiera. Se fue a vivir a Cuernavaca, a una casa con un gran jardín para que Lana corra todo lo que quiera. A su nuevo dueño le entregué el juguete favorito de Lana y le di todas las indicaciones que pude darle. Espero que Lana sea muy feliz.

La extrañaré poquito.

3 comments:

Unknown said...

jeje, lo de los labrador sigue en pie =P

Anonymous said...

uy que lástima... bueno qué te digo si pasé por la misma, pero saber que tu amado perro estará en mejores manos ayuda a no sentir tan culero ese huequito que deja su ausencia.

Anonymous said...

su perrita lana esta muy feliz segun los nuevos datos... y su nueva ksa ya esta en ruinas.. lo bueno de estoe s ke sus dueños son felices con lana.. o al menos e slo ke aparentan... tiene mucho patio para correr mucha tierra ke rascar y mmmmmm no c dejeme preguntar mas