Friday, August 17, 2007

Lágrimas de cocodrilos.


Los cocodrilos de verdad tienen razones para llorar. Es que no es por nada, ¡pero les va de la chingada! Primero los hacen sopa, ni hablar de los pobres que les toca ser zapatos, bolsas y demás accesorios; ahora deben soportar accidentes y sustos.


El primer pobre sujeto del que les contaré es un claro caso de depresión animal. Después de 15 años de vivir con un extraño sujeto en una ciudad de Rusia donde se dedican principalmente a la investigación nuclear, este pobre lagartijo se quiso suicidar, lanzándose desde la ventana del departamento en el que habitaba, en un duodécimo piso. Y es que no es para menos, ha de ser de la chingada medir un metro y vivir en un pinchurriento departamento de soltero.

Don Croqui, debido a las radiaciones nucleares a las que fue expuesto durante esos quince años, por sólo vivir ahí, desarrolló un poder mutante, lo que le permitió, en contra de su voluntad, sobrevivir a la caída, con nada más que un buen madrazo y un diente roto. Hoy, el cocodrilo busca nuevas formas de abandonar su miserable vida.

Otro caso más "local", fue el de aquel cocodrilo que recurrió a la técnica del atropellamiento para quitarse la vida. Se colocó bajo el automóvil de una familia, en la ciudad de Monterrey, esperando el momento en que el papá se fuera a trabajar. Sin embargo, el pobre fue descubierto y puesto a salvo por personal de Protección Civil.

El cocodrilo se encuentra actualmente bajo custodia, esperando ser remitido al penal animal (entiéndase zoológico) correspondiente, en caso de no ser reclamado por su "dueño" humano.

Pero ahí no para la cosa. Los cocodrilos son presa de maltratos y contrabando, como si de niñas mexicanas de familias pobres se tratara. ¡No es posible! También un estudiante árabe de 22 años trató de traficar bastantes ejemplares de reptiles, en los que se encontraba un nutrido grupo de crías de cocodrilos del Nilo. ¿Cuál fue su justificación? Que los necesitaba para investigaciones científicas en su universidad de Arabia Saudita. ¿Qué justificación se le da para traumar la infancia de los pobres cocodrilitos? ¡Ninguna, nada es suficiente para justificar este atropello!

Sin embargo, no todo son lágrimas... de cocodrilo. Aun hay un suspiro de esperanza entre este género de sangre fría. Todos los cocodrilos del mundo miran con admiración en sus ojos de rajadita, al cocodrilo Reggie. Después de año y medio de eludir a las autoridades, este valiente proscrito fue capturado en un lago de California y remitido al penal de alta seguridad, el Zoológico de los Ángeles, pero a sólo 5 meses de cautiverio, Reggie recuperó su libertad, rompiendo un lado de su jaula y emprendiendo la graciosa huída.

Desafortunadamente, sus dos metros de longitud y 50 kilos de peso no le permitieron llegar muy lejos. Fue capturado nuevamente en un área de carga. Reggie, como Knut en Alemania, tiene un grupo de fans que, cuando fue capturado, lo recibieron con globos y vítores a su llegada al zoológico, como si ser confinado a un hábitat de rejas y niños gritones fuera un triunfo. Reggie, encarcelado nuevamente, es un reptil hábil, que no se cansará de llevar a cabo sus rebeldes planes de escape. ¡Eso es todo, Reggie, eres la inspiración de los de tu especie!

Pobres reptiles. En definitiva, suckea ser cocodrilo.



Nota: las noticias son reales, pero aderezadas con el sabor de esta su servilleta. Todo lo sucedido es cierto; las razones... sólo los protagonistas las saben. ji ji ji...

1 comment:

Lilo said...

A mi parecer se me hacen EXTREMADAMENTE ESTÚPID@S las personas que tienen animales salvajes como mascotas....

Más que salvajes, animales no aptos para tenerlos en cautiverio ni mucho menos en un lugar tan cruel como lo es la Ciudad.

AShh ya me enoje ya mejor le llego...

PD. Que ondiux mi Brux... cuando hacemos otro sandwich?? jijiji